Me llamó la atención esta casa de la blogger Malin Persson y su familia, llena hasta los topes de “muebles de la abuela” o en cualquier caso piezas que tienen ya sus añitos, aportan carácter y contribuyen a crear un hogar único.
Si no tenemos la suerte de tener un cobertizo en la casa de la abuela llena de muebles antiguos, solución sin duda más económica, siempre podemos pasearnos por tiendas de segunda mano o de antigüedades donde poder escoger piezas tan singulares como estas.

Imágenes: the way we play
Pinturas naturales para paredes
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